Nada más confirmar el incidente al escuchar fuertes golpes en el área de contenedores, los funcionarios del puerto aseguraron que la autoridad local sospechaba que el niño era ciudadano de Bangladesh, pero aún no había confirmado su identidad.

Tras el rescate, el niño se encuentra en un hospital local en la ciudad portuaria de Malasia bajo vigilancia policial y en un tratamiento para mejor su estado de salud que se ha visto debilitado tras haber pasado seis días sin comer ni beber. Afortunadamente, ahora se encuentra estable. | @lavanguardia

[TIKTOK]