Marc-André ter Stegen es el portero más amado desde hace muchos años al Barça. Víctor Valdés era carismático pero arisco, en cambio, el alemán se ha incorporado tan bien en Catalunya, vive en Castelldefels, se casó en Sitges en el 2017, tiene dos hijos catalanes de 5 y un año, Ben y Tom Ter Stegen, va en metro, coge un patinete por el Mercado del Abaceria de Gràcia, es fabuloso. Todo lo hizo ser capitán del Barça un cargo que le otorgan los compañeros y requiere hablar mucho con el árbitro, siendo el portero le queda lejos pero da igual, es el hombre tranquilo. La pena es que la mujer no la estima tanto como los culés: el divorcio que anunciaron los dos ayer a las redes lo provocó una infidelidad de su mujer, Dani Jehle, hasta ahora conocida como Dani Ter Stegen. Ya no llevará el apellido. Lo más extraño es que ella lo engañó pero es él quien hace meses que vive en un hotel. Tan bueno es que ha dejado la mansión familiar a la mujer infiel y a los niños.
Hace unos días Juliana Canet afirmó en Catalunya Radio, que Ter Stegen hace 2 meses que vive solo en un hotel por culpa de una infidelidad de su mujer. Dani se ha liado con su entrenador personal. Ter Stegen ha pillado los cuernos, no se sabe si in fraganticomo no va a los partidos ni a los desplazamientos por su lesión y ya no pasa tanto tiempo fuera de casa. O si fue ella a quien confesó la aventura extramatrimonial. EN Blau ha tenido acceso a una información exclusiva: Dani Ter Stegen es alumna habitual del gimnasio que su amiga también WAG del Barça Anna Lewandowskatiene en la calle Balmes de Barcelona. Allí se ha visto entrenando a Dani Ter Stegen con entrenadores personales, sobre todo dos de origen latinoamericano. Dani se habría visto atraída por los cuerpos musculosos, piel bronceada y grandes sonrisas de estos profesionales de la educación física. Alguno se da la paradoja que se llama como ella. | @elnacional