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Los mejores chollos en Chollometro

Qué preferís, ¿vivir en un coche en Australia o en un chaletazo en Murcia?

Jéssica Aguiló que, a través de sus redes sociales, cuenta que se mudó a Australia hace unos meses, cumpliando así un sueño. La joven mallorquina de 30 años indica en sus perfiles de Instagram y X, antes Twitter, que es periodista y Social Media Manager.

Pero de las vivencias y aventuras que publica, ha llamado la atención recientemente una publicación en la que muestra que está viviendo dentro de su coche, por decisión propia, desde hace dos meses.

Como se puede ver en la publicación que ha compartido Jéssica, la joven vive dentro de un coche en el que se aprecia que se ha ‘fabricado’ una cama improvisada en la parte de atrás del vehículo, donde también guarda comida, utensilios de cocina, una guitarra o toallas. También se aprecia una almohada y lo que parece un cortina para separar esa ‘estancia’ de la parte delantera donde se conduce.

Algunos usuarios de la red social de Elon Musk también han expresado que la idea de vivir en un coche les desagrada, haciendo comentarios como: «Qué asco» o «Por no trabajar lo que se llega a hacer», ante lo cual la joven se ha defendido. | @abc

@JessicaAguilo

¿Qué te parece? En Australia no se andan con chorradas…

Este mes de agosto se ha conocido la resolución (al menos para el coche) de un caso que tuvo lugar en enero en las carreteras del estado de South Australia. Un conductor novel protagonizó una de las infracciones por exceso de velocidad más ‘bestias’ de los últimos tiempos.

El conductor en cuestión fue detectado en una autovía de Adelaidacirculando a 253 km/h con un Holden Commodore SS V8. Se trataba de un joven con el permiso recién obtenido (portaba incluso la L) de 20 añosde edad y, además de la velocidad excesiva (143 km/h por encima del límite de la vía), también se le detectó «cambiando agresivamente de carril» en varias ocasiones. El joven fue detenido únicamente porque una avería en su coche le obligó a ello. Además, ya tenía antecedentes con actos similares.

Las autoridades australianas consideraron este hecho «completamente inaceptable», porque circular a esa velocidad puede tener consecuencias «catastróficas» para el resto de conductores. «No podemos tolerar esto», fue la conclusión a la que llegaron, y actuaron con la dureza que le permiten sus leyes.

Para empezar, ingresando en prisión, prohibiéndole ponerse a los mandos de un vehículo a motor en los próximos seis años, pero también tomando medidas drásticas… contra su coche.

Condenado a la destrucción

En estos casos, el castigo para los infractores puede ser confiscar su coche (y sacarlos a subasta o venderlos para obtener fondos que se destinan a labores benéficas)… o incluso destruirlo. Y esto último es lo que sucedió con el Holden: acabó desguazado y convertido en un bloque de hierros. | @marca