Me llama la atención un fragmento de la entrevista:
Eduardo Casanova ha querido reflexionar sobre las críticas recibidas por parte de quienes lo tachan de provocador: «Es que lo soy en mi trabajo, pero no porque sí. Provocar es un deber del arte. Otra cosa es que haya quien se pueda sentir provocado por mis declaraciones o mi modo de vestir, por como soy. En ese caso, el problema es de los otros», confiesa en una entrevista realizada a Fotogramas. | @theobjective
Lo de que el arte es provocar lo he oído mil veces para justificar el «arte moderno». ¿Estáis de acuerdo? Porque para mí el arte ha de transmitir belleza o, en el caso de una película, entretener.
Curiosamente estas obras siempre se han de apoyar en palabrería retórica para justificártelas.
Mientras que éstas no necesitan justificación alguna.
Resumen:
