El hecho salió a la luz cuando un usuario de Facebook decidió compartir su experiencia en un grupo dedicado a recomendar comercios en la ciudad gallega. El cliente, visiblemente molesto, mostró el ticket de compra en una fotografía, detallando cómo la tortilla de patatas le costó cuatro euros más un euro adicional que le cobraron por el pan. Asimismo, el malestar del cliente no terminó ahí, ya que también recibió un cargo de 2,40 euros por una caña de cerveza. En total, las dos cosas le costaron la asombrosa cantidad de 7,40 euros. «Por educación pagué y me fui, pero también sé dónde no volver… Tomar nota, manda huevos», escribió el usuario de Facebook indignado, dejando en claro que no tiene intención ninguna de regresar a ese establecimiento. @abc