Esta señora vive en el 3025. pic.twitter.com/kWeHFggFoT
— Hannibal Lecter (@Doc_Hannibal) July 29, 2021
Frente a la música clásica, el folclore y la electrónica, el reguetón provoca una mayor activación en las regiones del cerebro encargadas de procesar no sólo los sonidos, sino también el movimiento. Así lo demuestra un estudio llevado a cabo por investigadores canarios que analiza la actividad cerebral que produce escuchar diferentes estilos musicales. | @elmundo