“Un vestíbulo polivalente, en contacto con la calle, permite desdibujar los límites y apropiarse del espacio público”, cuentan desde NUA arquitectures.
El vestíbulo sirve como espacio de almacenaje y como área diáfana en la que jugar u organizar grandes reuniones.
Al fondo del vestíbulo, un pequeño patio acristalado aporta luminosidad al espacio.
Las aperturas y ‘vaciados’ de la casa permiten una alta luminosidad que desafía la longitud de su fachada y su disposición.
El patio de la primera planta es una de las soluciones aportadas por NUA Arquitectures para hacer habitable el espacio.
Esta gran cristalera permite caldear la casa en los meses fríos, captando toda la luz del sol.
La rejilla deja pasar la luz, ofreciendo luminosidad al pequeño patio del vestíbulo.
La terraza de la planta alta permite disfrutar a cielo abierto.
El extensivo uso del color blanco, de los tonos neutros y de la cristalería crea un interior liviano.
La escalera articula las cuatro plantas de la propiedad, que posee, en conjunto, 207 metros cuadrados.