Aquí os dejo un artículo para que aprendáis a analizar vuestras heces fecales (color y consistencia)

Consistencia: la Escala de Bristol

La descripción del aspecto de cada modalidad a simple vista es la siguiente:

Tipo 1: Fragmentos duros y separados, tipo nueces, difíciles de evacuar.

Tipo 2: Forma de salchicha, compuesta de fragmentos visibles.

Tipo 3: Forma de salchicha o morcilla, con grietas en su superficie.

Tipo 4: Forma de salchicha o serpiente, suave y lisa.

Tipo 5: Trozos de masa pastosa, de bordes bien definidos y fáciles de evacuar.

Tipo 6: Fragmentos blandos y esponjosos, con bordes irregulares y consistencia blanda o pastosa.

Tipo 7: Heces acuosas, sin fragmentos sólidos, totalmente líquidas.

Color: más allá del marrón

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Sin embargo, el consumo de algunos alimentos y fármacos, así como ciertos procesos patológicos, pueden variar su «paleta» cromática. Hagamos una guía tipo Pantone que nos ayude a interpretar el color de nuestras deposiciones:

Verde: Espinacas, brécol y otros alimentos ricos en clorofila pueden provocar una coloración verdosa. Pero también la Salmonella, una bacteria de la que seguro ha oído hablar y que puede producir cuadros de gastroenteritis. ¿Entonces? Si se encuentra bien y ha comido espinacas, no debe preocuparse. De no ser así, y si además sufre diarrea, náuseas, vómitos o fiebre, sospeche y busque atención sanitaria.

Naranja: Alimentos ricos en betacarotenos como la zanahoria o la calabaza pueden teñir las heces de este color. También lo hacen la rifampicina –un fármaco muy utilizado para el tratamiento de infecciones micobacterianas como la tuberculosis– y algunos antiácidos.

Amarillo: Sugiere la presencia de una cantidad excesiva de grasa en los excrementos, lo que puede deberse a problemas de absorción intestinal (como en la enfermedad celíaca y el SIBO) o a un déficit de enzimas pancreáticas o de bilis. Si hay exceso de grasa, las deposiciones también brillarán y flotarán.

Blanco: Las deposiciones blanquecinas, pálidas o grisáceas avisan de alteración hepática o de la vesícula biliar.

Rojo: Puede explicarse por pequeños restos de alimentos sin digerir, como la piel del tomate o el pimiento rojo, pero también por la presencia de sangre en heces. Pequeñas hebras rojas en la superficie suelen ser indicio de hemorroides o fisuras. Si la sangre está mezclada con las deposiciones, debemos pensar en procesos inflamatorios intestinales o en la presencia de pólipos o tumores.

Negro: Aunque parezca extraño, también puede deberse a la presencia de sangre. En este caso, corresponde a restos de un sangrado en los tramos altos del tubo digestivo: al ser «digerida» en su tránsito, la sangre adquiere un color oscuro cercano al negro. Estas heces, que clínicamente llamamos «melenas», suelen desprender un olor muy fuerte y quedarse muy adheridas al WC. Otras causas de heces negras pueden ser el consumo de fármacos como el hierro o de alimentos como la tinta de calamar, la remolacha o los arándanos.

@abc

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Las discotecas murcianas on fire

Las llamadas indicaban que el incendio se originó en el techo del local y que las personas que se encontraban dentro pudieron salir por su pie. Este sábado estaba prevista su apertura en una noche dedicada a la rumba con animación en vivo con el dj Walker Mintserrat, mientras que este viernes se centró en una fiesta mexicana.

Conspiracy…

El peculiar incidente con el hombre que parecía tener sus capacidades mentales afectadas ocurrió ayer lunes. Fue interceptado en la avenida de El Llano por una patrulla de la Guardia Civil que vio su conducir errático y su llamativa estampa mientras circulaba por la autovía del Cantábrico. Comprobaron que entraba en Gijón por el nudo de El Llano y le siguieron. Le ordenaron detener el vehículo y que les entregase la documentación personal y también la del coche. El hilo de la conversación era hilarante. El individuo, natural de Barcelona, aseguraba que llevaba conduciendo durante horas, huyendo de otras personas que le perseguían desde Cataluña.

En la cabeza llevaba un sombrero confeccionado de forma manual con papel de plata y manifestaba que lo llevaba para que las ondas magnéticas no le afectasen a la cabeza. Precisamente al ver que no la tenía lúcida y parecía que tenía algún tipo de alteración psiquiátrica, fue llevado por los sanitarios del Hospital de Jove, donde quedó ingresado. | @elcomercio