Muy fan

 

 

Desde exámenes que duran horas hasta controles prácticos difíciles de afrontar. Las pruebas de las universidades pueden ser complicadas, pero si además son originales, parece que la dificultad pasa a un segundo plano. Y si no que se lo digan a los estudiantes de Ingeniería Civil de la Universidad de Canterbury (Nueva Zelanda), que cada año viven un examen concreto como todo un acontecimiento.

Desde hace más de 25 años, los alumnos de 2º de esta carrera tienen la asignatura Puentes, y qué mejor forma de poder demostrar tus conocimientos sobre estas construcciones que crear uno. Pero no uno cualquiera, sino uno que soporte exactamente el número de personas que pide el profesor.

Los estudiantes de Ingeniería Civil han de construir un puente que aguante el peso de dos personas, pero se derrumbe con tres. Esas son las características del examen práctico que, cada año, los alumnos realizan en un riachuelo ante la atenta mirada del resto de universitarios. | @20m